Esta herida se la produjo el caballo suelto cuando corría y chocó contra unos hierros, produciéndole uno de los hierros esta laceración que llega hasta la articulación.
Se procedió al cierre primario de la herida, y a pesar del riesgo de infección acticular y dehiscencia de la sutura, (como consecuencia de la posible infección y por la movilidad de la región), se consiguió un resultado estético satisfactorio en un tiempo de curación razonable.
En las siguiente imágenes vemos la evolución.