A veces es obvio cuándo llamar a un veterinario. Otras veces los síntomas pueden ser menos evidentes, sin embargo la atención inmediata de un veterinario siempre es una garantia para la salud del caballo.
Es un falso ahorro ignorar una lesión o enfermedad, el tratamiento precoz de un veterinario puede asegurar una recuperación más rápida y evitar que se agrave el problema.
Es muy recomendable que si usted está preocupado por la salud de su caballo contacte con su veterinario.
Por ejemplo, una lesión grave de un accidente de tráfico o una caída grave o de un accidente en el campo o en el patio etc...
Esto incluye grandes heridas, sangrando importante, quemaduras, colapso o pérdida del equilibrio, dolor continuo, cojera, heridas graves en las articulaciones, heridas punzantes profundas. Esto también incluye sangrado continuo de la boca, la nariz, el recto, la vagina, el pene etc ...
Un caballo que apenas pone el peso sobre una extremidad debe ser visto por el veterinario urgentemente.
Cojera severa y sudoración significativa, agitación, dolor, rechazo a comer, abatimiento, también son señales de que el caballo debe ser visto urgentemente por el veterinario. Dolor intenso abdominal, si el caballo sube y baja la cabeza repetidamente, morder o patear a los flancos, patea el suelo, aumento de la frecuencia de la respiración, trata de defecar u orinar sin resultado ...
Siempre contacte con su veterinario si no está seguro acerca de la salud de su caballo o si usted cree que su caballo no está bien o su condición se está deteriorando.